En el artículo de hoy vamos a resumir las diferencias entre habilidades, competencias y capacidades, valores que tenemos muy en cuenta en Splacing.com para poder ofrecer el mejor servicio tanto a los clientes que buscan a profesionales, como a dichos profesionales para que puedan ofrecer la excelencia en sus servicios.
Si hablamos de HABILIDADES hablamos de:
Trabajar en equipo
Ser capaz de trabajar en equipo es una habilidad indispensable, independientemente de la empresa en la que estés. Trabajar cómodamente en grupo mejora la eficiencia del equipo y su capacidad para resolver problemas.
Ser organizado
¿Sabes planificar y organizar tu trabajo adecuadamente? Tener la habilidad de priorizar significa que siempre te enfocarás en las tareas más importantes para el equipo y para tu emprendimiento.
La comunicación es clave
¿Sabes expresarte adecuadamente ante tus compañeros de equipo?, ¿tienes la capacidad de empatizar con tus compañeros? Ser capaz de expresarse adecuadamente y escuchar a los demás es esencial tanto para la compañía como de cara a los clientes. Trabajar en tu capacidad de comunicación, te dará una clara ventaja para desarrollar tu trabajo constantemente.
Dar tu opinión
Otro aspecto importante de la comunicación es la habilidad de expresar tu opinión a otras personas, especialmente si te encuentras en una posición de liderazgo. Tus ideas, propuestas y soluciones serán sólo bien recibidas si eres capaz de expresarlas de forma amable y asertiva.
Pensamiento analítico
Una habilidad que también resalta es la capacidad de pensar de manera analítica. Tener un enfoque objetivo ayuda a resolver problemas y a descartar métodos o procesos innecesarios. Si ocupas una posición de liderazgo, estamos seguros de que tu equipo apreciará la habilidad para analizar y evaluar objetivamente cualquier situación.
En lo que respecta a las COMPETENCIAS podemos hablar de:
La toma de decisiones es fundamental para intervenir en situaciones difíciles para los negocios.
Planificación y organización:
Sea cual sea el trabajo al que una persona desee, la planificación y la organización son competencias fundamentales. Planear es gestionar el tiempo, los plazos y dar la importancia justa a cada función o actividad.
Habilidades comunicativas:
Un buen profesional debe comunicarse de manera eficaz y coherente. En la forma en que expresa sus ideas radica parte de su éxito. También tiene que desarrollar la escucha activa, la inteligencia emocional y la gestión acertada de grupos de colaboradores o reuniones.
Análisis de datos:
En la era de la información, son muy pocos los profesionales que no trabajan con datos o mensajes. Todo está prácticamente atravesado por la información. Pero los datos por sí solos no bastan; hay que saber analizarlos y extraer de ellos lo que se considere más importante en cada circunstancia.
Uso de programas informáticos:
Por supuesto, el uso de programas informáticos es un requisito muy importante para poder aprovechar todas las oportunidades que nos ofrecen las redes sociales porque nos guste o no lo digital ya forma parte de nuestros hábitos y en cierta forma nos define.
Ventas y persuasión:
También importa la capacidad de persuasión para compartir los beneficios de tu negocio, sobre todo en esos ambientes en los que la negociación y las ventas son elementos centrales. Saber vender es todo un arte que es preciso desarrollar.
Y, por último, las CAPACIDADES son:
Lo que realmente importa en el mundo de los negocios es quien eres y lo que haces. Sin simpatía no hay relaciones a largo plazo. Si no eres uno de los mejores en tu campo tampoco. Puedes engañar a poca gente durante un tiempo, pero nunca a todos para siempre. Aunque seas una persona con pocas dotes de comunicación y principiante en el tema en el que te quieres lanzar hay buenas noticias.
1. Tener empatía: sin duda hay personas que tienen más empatía que los demás. Esta capacidad es como un talento porque sin necesidad de utilizar palabras y casi de manera telepática una persona es capaz de sentir lo que siente la otra. El lado opuesto es aquellas que en sus acciones no piensan en cómo puede llegar un mensaje a los demás. Si es tu caso tómate el tiempo para ponerte en la piel de la otra persona. ¿Cuáles son sus intereses? ¿Le encajará mi oferta? ¿Estoy hiriendo sus sentimientos? No des ningún paso sin hacerte estas y más preguntas si no eres la persona con más empatía del mundo.
2. Comunicar con disciplina: no se trata únicamente de comunicar a tiempo. También tienes que ser capaz de enviar mensajes entre líneas y redactar un mail para que te entiendan y respondan. La típica excusa de la falta de tiempo hace que pocas personas hagan el esfuerzo para entenderse bien. Requiere disciplina comunicar bien porque hay que tomarse el tiempo de analizar las frases y mensajes para conseguir un ratio alto de comprensión y reducir el riesgo de mal interpretación. Las cosas realmente importantes hay que decirles en primera persona.
3. Desarrolla tu creatividad: “yo no soy una persona muy creativa”. Con esa frase para muchas personas el tema está resuelto. Igual tienes la mala suerte de no ser un afortunado que se te de bien generar nuevas ideas. En tal caso juegas con una pequeña desventaja, pero no significa que el partido esté perdido. Todo, absolutamente todo se puede entrenar. Ser creativo no significa ser caótico. En ocasiones puede requerir disciplina entrar en este proceso de innovación.
4. Aprender continuamente: nada está acabado. “No existen mapas”. Tenemos que encontrar nuevos caminos y aprender de aquellos de los que nos llevan ventaja en el recorrido. El conocimiento no vale mucho sin la puesta en práctica por lo que llega el momento en el que tarde o temprano hay que dar el salto al vacío y mojarse. Al principio es desagradable, pero al final merece la pena.
5. Salir de la zona de confort: Haz pequeños pasos. Salta un momento y luego vuelve. Entrénate. Afróntate a situaciones desagradables. Si no te gusta hablar por teléfono con personas desconocidas hazlo una vez al día. ¿Te quedas sin aliento si tienes que subir 2 plantas porque no hay ascensor en el edificio? A partir de ahora subirás cada vez las primeras 2 plantas y cogerás el ascensor después. Si no consigues realizar este quinto punto de la lista lo vas a tener muy complicado para realizar los primeros 4.
Si trabajas en estos puntos a nivel personal, eso se verá reflejado en tu trabajo, por lo que podemos entender que nuestra empresa siempre va a ser un espejo de quienes somos, por tanto, si trabajas en ti, tu empresa también va a ganar. En Splacing valoramos y nos esforzamos en cuidar todos estos aspectos para poderte ofrecer nuestra mejor versión, calidad en servicios, tanto a nivel personal como profesional.
En Splacing.com tenemos amplia experiencia en contacto tanto con usuarios que necesitan pintar, limpiar o realizar un servicio de carpintería o mudanza como con profesionales de todos los sectores ( carpinteros aluminio o madera, pintores, empresas limpieza, instaladores electricidad, clima, empresas mudanzas ) y todos los factores que hemos explicado anteriormente hace que una oferta de un servicio o trabajo pueda decantarse para un profesional u otro. Los usuarios cada vez son más exigentes y los profesionales tienen que adaptar productos y servicios a estas necesidades.
